miércoles, 16 de enero de 2013

El Amor nuevo


Todo amor nuevo que aparece 
nos ilumina la existencia, 
nos la perfuma y enflorece. 
 
En la más densa oscuridad 
toda mujer es refulgencia 
y todo amor es claridad. 
Para curar la pertinaz 
pena, en las almas escondida, 
un nuevo amor es eficaz; 
porque se posa en nuestro mal 
sin lastimar nunca la herida, 
como un destello en un cristal. 
 
Como un ensueño en una cuna, 
como se posa en la rüina 
la piedad del rayo de la luna. 
como un encanto en un hastío, 
como en la punta de una espina 
una gotita de rocío... 
 
¿Que también sabe hacer sufrir? 
¿Que también sabe hacer llorar? 
¿Que también sabe hacer morir? 
 
-Es que tú no supiste amar...
"Amado Nervo"

martes, 15 de enero de 2013

"La mujer es diferente al hombre que aparece incomprensible, llena de secretos, extraña por eso es enemiga."
Freud

¿Qué es lo ajeno de la mujer? 

El cuerpo femenino  es el lugar por excelencia que nos dice del enigma, de  lo inexplicable del goce y del erotismo que se multiplica en ilimitadas zonas del cuerpo que no se circunscriben a lo fálico. La mujer no es fácil de cercar y menos aún de comprender,  no se  puede saber  nunca con exactitud cómo goza una mujer,  en fin la mujer encarna un goce que es ilimitado. Esto la convierte en extraña y ajena al hombre que goza con su falo de una manera más estable y previsible. Lo sorprendente es que  esta extrañeza o ajenidad, concierne tanto a los hombres como a las mujeres, por eso Freud nos dice que no se nace mujer, “se adviene”, y para eso la propia  mujer necesita de Otra que haga de su referente, como punto de partida.